martes, 21 de agosto de 2007

interior mundo

la ciudad me entra y sale despacio
la travesía me diluye y confunde las partículas
todo lo que tanto deseo mucho deseo
hundir mis dedos en el frío límite de la jaula

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Me vino a la mente el tema de Sabina que dice:

"y al pisar la estación
le abrí la jaula a mi corazón
tras las montañas estaba el mar,
la noche, él vértigo, la ciudad"

Hipotermia dijo...

lsd,

hola. qué estimulante tu visita. trae aires de andes? o de precordillera? me pareció.
ojalá pudiera escribir una sola estrofa como sabina. parece fácil pero no es. no para mí al menos. me conformo con la reminiscencia entonces.

gracias por venir y saludos

piscica dijo...

yo me imagino que la jaula entra y sale como tu ciudad
y que el mundo interior es el de los dedos que pueden tocan todo tu mucho deseo

Hipotermia dijo...

Píscica,

qué honor tu visita.
imaginas con precisión, me volvés transparente.

Un beso.

piscica dijo...

transparentarnos, las dos estamos hechas de agua.

María dijo...

"hundir mis dedos"...

"jaula"

y pensar que a veces ahí comienza la libertad. Sí, la libertad, esa que es tan frágil.

(Mientras la leo, lo que no leía antes)